Limpiar nuestros lentes es una tarea simple y sencilla pero bastante necesaria y que podría incluso llegar a ser diaria, dependiendo del tipo de ambiente al que nos veamos expuestos.
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Aunque muchas personas suelen confiarse de pasarle cualquier producto al cristal, sin saber que esto podría perjudicar bastante el buen estado de los mismos. Es por esto que en esta oportunidad te brindaremos alguna información para que logres una limpieza eficiente y que estos elementos queden como nuevos.
Dentro de estos consejos, además, la desinfección estará caracterizada por la utilización de productos sumamente baratos que podrás encontrar en cualquier rincón de tu casa.
Desinfectar los anteojos es esencial debido a que si los usamos a diario, están en contacto con virus y bacterias que sin duda podrán perjudicar la salud de nuestros ojos. Además de esto, si los anteojos están sucios, también pierden su calidad para hacernos ver mejor, por lo que estaremos obligados a forzar la vista, y esto también será negativo para la vista.
Es de vital importancia limpiar cada objeto que tocamos, más todavía si lo hacemos en la calle y después esos objetos pueden ir a nuestros ojos o boca. Hay que recordar que nuestros lentes pueden ser caldo de cultivo de diferentes virus que nos podrían causar enfermedades.
Así debes limpiar los anteojos
Para que gafas y lentes queden impecables y sin manchas de dedos ni bacterias, será necesario tener vinagre blanco (con gran poder desinfectante) y un pulverizador o botella de alcohol de mano para mezclar junto al lavavajillas y al agua.
Para realizar este procedimiento de limpieza primero debemos añadir a la botella un poco de vinagre blanco, luego dos partes de agua y un par de gotas de lavavajillas líquido. A continuación, se debe agitar un par de veces y luego aplicar en los cristales, pasando luego un trapito para quitar gotas y pelusas que hayan quedado.
