Los canales de noticias lo grabaron llorando poco después de que supuestamente encontrara el cadáver de su hijo de cinco años, pero actualmente, casi 35 años después, los reporteros difunden su imagen como detenido por el asesinato del niño.
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El padre y presunto homicida es Victor Lee Turner, ahora de 69 años, y con él, también apresaron a su esposa, Megan Renee Turner, de 63 años, madrastra del menor, quien se llamaba Justin Lee Turner. Los aprehendieron el pasado martes en su casa, ubicada en Cross Hill, informó New York Post.
“No puedo pensar en un asesinato más trágico y horrendo: el de un niño de cinco años”, dijo ante los periodistas el sheriff Duane Lewis, del Condado de Berkeley en Estados Unidos.
El citado medio expuso que Megan contó que el día que desapareció el niño, ella estaba en la ducha en su casa de ese tiempo en Moncks Corner. Según su versión, mientras se encontraba en el baño, el pequeño salió desde la casa de un vecino para tomar el autobús a la escuela. Contó que no se enteró que estaba desaparecido hasta la tarde cuando el infante no regresó del colegio.
Sin embargo, la versión de la mujer no coincidía con la del vecino, ya que este dijo que nunca vio al niño.
“Nunca subió a ese autobús porque estaba muerto dentro de esa casa”, dijo el sheriff, según se lee en New York Post.
Padre llorando
En la reseña de The Post destaca el hecho de que a Victor lo captaron llorando poco después de que supuestamente consiguiera el cadáver de su hijo. En ese entonces, el hombre ni siquiera se acercó al cuerpo del niño para ver cómo estaba, sino que avisó a la policía y admitió que no tocó sus restos.
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El sólo hecho de la actitud del padre llama la atención, debido a que cualquier padre o madre, se acercaría a su hijo para tratar de ayudarlo. Los estudios forenses determinaron que el pequeño sufrió abuso sexual y estrangulamiento, pero la investigación se estancó.
Más de tres décadas después, en el 2021, reabrieron el caso y con la ayuda de la tecnología, descubrieron evidencia suficiente para arrestar a su padre y a su madrastra.
The Post dice que los estudios encontraron que al niño lo colocaron muerto en el sitio en donde fue encontrado, además detalla que una ligadura en la casa de la pareja concordó con las heridas del niño y que las fibras de estas ligaduras eran consistentes con el material en el cuello de su camisa.
Aspectos relevantes
Otros aspectos que llamaron la atención de los investigadores es que después del asesinato del niño, el hombre y su esposa se mudaron a Cross Hill, a 165 millas de distancia. A esto se suma, que nunca llamaron a la policía para saber cómo seguían las investigaciones por el homicidio.
“¿No es eso extraño? Nunca recibí una llamada telefónica, ni una sola llamada de su papá o su madrastra. ‘¿Qué están haciendo todos ustedes con respecto a la muerte de mi hijo?’ Ninguno. ¿Qué te dice eso?”, dijo Lewis.
The Post precisa que otro elemento que resultó sospechoso es el hombre preguntó “qué pasaría si un miembro de la familia hubiera “hecho daño a la víctima, como matarlo”, agrega la orden.
Actualmente, la pareja está detenida en el Centro de Detención Hill-Finklea, no les dieron derecho a fianza.