WASHINGTON (AP) — El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijo el martes que es poco probable que el banco central eleve las tasas de interés ante indicios de una inflación persistente, y enfatizó su pronóstico de que pronto empezarán a atenuarse los aumentos de precios.
PUBLICIDAD
Aun así, Powell, en una conferencia en Ámsterdam, admitió que su creencia de que la inflación cederá “no es tan alta como antes” porque los aumentos de precios se han mantenido en los primeros tres meses del año. Powell enfatizó que la estrategia del banco central estadounidense es mantener las tasas donde están ahora, en un máximo de dos décadas, y no elevarlas.
“No creo que sea probable, basado en los datos que tenemos, que nuestra próxima decisión sea un aumento de las tasas”, dijo Powell. “Creo que lo más probable es que mantengamos la tasa donde está”.
Los mercados financieros y los economistas están esperando indicios de que el banco reducirá las tasas de interés una o dos veces este año, ya que la inflación ha disminuido pronunciadamente desde el pico que alcanzó en 2022. Pero con los aumentos de precios todavía intensos, Powell y otros funcionarios de la Fed han indicado que, por lo pronto, es poco probable que haya un recorte de las tasas.
Powell habló horas después de que el gobierno estadounidense emitió un reporte según el cual la inflación mayorista aumentó en abril. El miércoles, el gobierno emitirá el reporte sobre la inflación al consumidor, que previsiblemente mostrará que las alzas de precios cedieron un poco el mes pasado.
En sus comentarios el martes, Powell restó importancia al reporte sobre la inflación mayorista, que también mostró que algunas alzas de precios cedieron el mes pasado, como los de boletos aéreos, hospitalizaciones y seguros automovilísticos.
“Yo no la llamaría caliente”, dijo Powell en referencia a la inflación mayorista. “Yo la llamaría un poco mixta”.
PUBLICIDAD
Los economistas están divididos en cuanto a si la alta inflación de este año refleja una reaceleración de los precios o si es más bien consecuencia de las distorsiones económicas causadas por la pandemia.
Los seguros automovilísticos, por ejemplo, han aumentado 22% respecto de hace un año, pero ello podría ser reflejo de factores específicos para la industria automovilística: los precios de los carros nuevos subieron pronunciadamente durante la pandemia, y las aseguradoras ahora están tratando de compensar los mayores costos de reparación y reemplazo mediante el aumento de las pólizas.